Construida por la familia real del principado de Nabha, esta casa es un palacio usado por los miembros de la casa real durante su estadía en Kurukshetra para ceremonias religiosas. Puede alcanzarse fácilmente ya que se encuentra justo en oposición al Sannahit Sarovar en Kurukshetra.

La estructura, construida en el siglo XIX, presume una arquitectura hindú, digna de ser elogiada. Encaramado sobre una plataforma elevada, los lados de la casa están decorados con mirhabs, o nichos arqueados y el portón de entrada está del lado este. Al atravesar este portón, encontrarás un patio rectangular, donde hay un tramo escalonado del lado sur que da paso a un templo dedicado a Brahma, en el segundo piso. El templo tiene alrededor de 4,5 metros de altura y está construido según el plan navaratha (nueve esquinas). Al entrar, presta atención a su puerta de madera, clavada con clavos decorativos representativos del estilo de arquitectura hindú. Además, el complejo posee dos bellas ventanas en pilares (jharokhas) que lucen diseños de loto, en el segundo piso.

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